Síndrome de Fatiga crónica, un gran reto!
Finales de Julio 2011
Me enfrento a un gran reto, me gusta aprender, y ahora más que nunca me comprometo a aprender algo vital en mi proceso de sanación.
Las dos primeras semanas de Julio fueron duras, recaí de tal manera que llegué a pensar que volvía al principio cuando no podía ni levantarme de la cama.
Asocie esa recaída a varios factores:
1*Herbicida en un jardín comunitario que hay detrás de mi casa.
2* Gasolina proveniente del garaje comunitario.
3*Exceso de actividad por mi parte debido a la acumulación de tareas «aparentemente muy necesarias».
Como sólo puedo controlar y cambiar la número 3, es de ello de lo que escribo en este post.
Llamé a mi Dra y llegamos a una conclusión «tenía que echar el freno»!
Actualmente ya es conocido que el síntoma de fatiga extrema que acompaña al SFC tras una actividad, se debe a que el cuerpo de esa persona está usando energía a un ratio mayor de la que es capaz de producir.
El enfermo de SFC no se puede comparar a aquel que fue antes de enfermar (en el sentido de capacidad física), el progreso hay que medirlo y ajustarlo día a día.
Hay que valorar cuanto se puede hacer o dejar de hacer en un día, y (esta es la clave) hacer SIEMPRE menos de lo que podemos para así evitar entrar en un círculo vicioso en el cual usas absolutamente toda la energía generada y acabas agotando de nuevo al cuerpo.
Esta práctica no es fácil, sobre todo cuando se empieza a tener mejorías y días «buenos» en donde algo de energía vuelve a aparecer en nuestras vidas, hurra!!!
La clave de recuperación del sistema de energía está en ir despacio y sólo introducir una actividad nueva del siguiente modo:
1.Con el fin de permitir que el cuerpo mantenga larecien llegada «nueva producción de energia» (no hacer absolutamente nada de actividad extra durante semanas aún notando que se podria incrementar la actividad ya que sentimos que nos vamos encontrando mejor.
2. Despues de unas semanas en 1., aumentar ligeramente la actividad,siempre y cuando esto no nos provoque «fatiga post-ejercicio» o lo que yo llamo «resaca del día siguiente». Si la hay, significa que nos hemos pasado.
Esto a simple vista parece fácil pero por mi experiencia sé que no lo es.
Por una parte hay que escuchar las señales de nuestro cuerpo, ir poco a poco y no desanimarnos al primer intento.
Lentos pero seguros!!
*Esta práctica de escucha y aumento consciente de actividad considero que solo se dará una vez notemos un incremento de energía como consecuencia de un tratamiento ortomolecular y especifico para el SFC, forzar al cuerpo (como aconsejan algunos médicos)cuando este no ha recuperado nada de vitalidad no solo no sirve de nada sino que indudablemente hará empeorar al enfermo.
Me ha encantado este post. Es algo básico pero que no se suele llevar a la práctica y conviene recordarlo.