Sin ti, no es lo mismo…

A David mi amor, esta entrada que escribí hace tiempo, no le hace justicia….

Muchas veces, muchísimas, me planteo, sí mi camino de sanación hubiera sido tan estable sin David a mi lado.

En esta bendita isla donde vivo, a la que acompaña siempre el viento pero no la lluvia, justo hoy,  llueve con fuerza  y hace frío…esto me hace estar sensible y me siento vulnerable a mis recuerdos…

Desde siempre sentí que  David es la persona con la que quiero envejecer y creo que este es el motivo por el cual, desde un principio, me parecía haber pasado ya, una vida entera a su lado…

En un momento dado de nuestra historia, nuestro amor flaqueo y no fuimos conscientes hasta tiempo después, que ese amor, no hacia más que fortalecerse en la distancia.

La ausencia física de David, me ayudó a ver que  la vida sin él, ya no era lo mismo.

David, en el 2009, se fue a India a pasar el invierno. No podía soportar por más tiempo verme tan enferma, las expectativas de mejoría aún no se vislumbraban y esa fue la salida a un momento de la vida, que se nos mostraba tan miserable.

Antes de irse,  él era el que me sacaba de casa los fines de semana, montábamos en el coche y como yo apenas podía caminar, él conducía lo más adentro de las montañas, que el coche le permitía, y allí, nos quedábamos plantados, oxigenando nuestros pulmones con la esperanza inconsciente de que ese aire puro, también  oxigenara nuestra relación.

Pero no  fue así, y finalmente a finales de Octubre, David se fue a India (tierra a la que ambos amamos) y yo me quedé sola,  en esa casa de la montaña con mi gran amigo Shiro, y la compañía incondicional de mi madre que me ayudaba en todo lo que podía…

Llegaron  los fines de semana de ese  invierno y yo, contemplaba la vida pasar, desde la ventana de mi habitación, pensando en que lo único que deseaba en ese momento, era que David volviera pronto, para sacarme al bosque de nuevo y pedir desde allí al universo, que nuestro amor volviera a cobrar fuerza.

Fue el invierno más triste de mi vida, aún así la ausencia de David y el vacío que trajo, me hizo coger fuerzas y perseverar más que nunca en el intento de recuperarme y recuperarlo. En ese momento nada tenia sentido sin él…

David volvió de India  a los 4 meses porque se lo pedí y él me lo concedió…retomar la relación no fue un camino de rosas, yo seguía con SQM, FM Y SFC ,los cambios de humor, fatiga y dolor corporal aún estaban presentes, pero  a lo lejos, detrás de todo este escenario, ya se empezaba a atisbar una pequeña recuperación, ambos nos aferramos a esto,  como si nuestra vida dependiera de ello. Y vencimos….

Y estás palabras son para ti,

«David:

-Has sido y eres un gran pilar en mi vida.

-Gracias por todas las fuerzas que me das cuando la oscuridad parece que vuelve a acechar.

-Por esperar un poco más de tiempo y  darme la oportunidad de demostrarte que volvería a ser la misma persona que conociste y que juntos podríamos crear algo bonito.

-Por haber creado un hogar conmigo y con Shiro donde las raíces se adentran más y más cada día y hacen que por fin, nos sintamos enraizados a algún lugar.

-Por no dejarme caer jamás en el dramatismo de la enfermedad y de la vida en sí, y eso que a veces quiero jugar a ser infeliz….gracias por no cansarte de contarme una y otra vez, que esa, no es una  actitud que valga la pena.

-Por ayudarme a aceptar cada una de mis emociones y de mis momentos, ya sean risas, lloros, lágrimas, ira o melancolía…. sin reprimirlas, censurarlas o juzgarlas.

-Por ilusionarte conmigo ante la vida que se nos muestra cambiante cada día y aceptar las alegrías y las tristezas, que nuestro padre del cielo nos tiene preparadas.

-Por ayudarme a volver a creer en mí y hacerme ver todas las cualidades que yo no creía tener.

-Por permitir que nuestra vida la dirija alguien que sabe más que nosotros, gracias por recordarme, si es que me olvido,  que todo está bien en nuestro mundo y que no somos quien para juzgar a nada ni a nadie.

Sin ti, no es lo mismo… 

ETERNAMENTE, TE AMO