Mi experiencia PALEO

Mi entrada más reciente habla sobre la Paleo dieta,  a continuación, os cuento  mi experiencia.

En el 2008-2009 mi estado de salud era muy crítico, la enfermedad me tuvo postrada en cama durante dos largos años.

En el 2010 comencé un tratamiento  con medicina ortomolecular  y cambie mi manera de comer.

Mi dieta ya estaba exenta de todo lo que pudiera contribuir a la candidiasis y descubrir la paleo dieta hizo que decidiera aumentar mi ingesta de proteína animal ecológica y que redujera poco a poco la ingesta de cereal, nunca totalmente, ni de forma drástica.

En esos momentos tenia crisis fuertes de hipoglucemia y necesitaba comer constantemente y mucho, los cereales integrales me ayudaban a mantener los niveles de glucosa más estables, aunque descubrí que al disminuir la cantidad de cereal, poco a poco la hipoglucemia mejoró y en la actualidad no la padezco.

Note una gran mejoría en mis niveles de energía a medida que fuí introduciendo carne y pescado en mi dieta de forma regular, o sea todos los días, a menudo en comida y cena.

Durante esa epoca tampoco podía ingerir pescado, estaba muy intoxicada por mercurio y reaccionaba con cansancio, picores y sarpullidos a la minima ingesta.

Al cabo de 2 años de tratamiento (en el 2012) comencé a introducir pescados pequeños: sardinas, boquerón, pescadilla fina, una vez a la semana y ví que ya no reaccionaba.

Se trata de observar tu cuerpo y por supuesto no comer nunca,ningún pescado de piscifactoría o de los que conllevan  riesgo por su alto contenido en mercurio, estos son el atún,bacalao, bonito, pez espada y el  mero, además de los congelados pues al hielo le suelen añadir químicos para que aguante más tiempo a alta temperatura.Estos pescados no forman parte de mi alimentación en la actualidad aunque ya no estoy intoxicada por mercurio.

Procuro comer proteína animal de calidad, ecológica exenta de antibióticos y hormonas.De animales que han crecido correteando libremente, respetando su ritmo de crecimiento natural.

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MI DIETA NO INCLUYE

• Cereales con gluten (trigo, espelta, cebada o centeno), 3-4 veces por semana tomo arroz  integral o quinoa ecológicos.
• Legumbres , salvo en alguna ocasión lentejas rojas con leche de coco bien cocinadas, de manera que prácticamente es un crema ligera. Nunca tomo soja!
• Azúcar (blanca, morena, panela o como la quieras llamar…), ni agaves, ni siropes,ni edulcorantes.
• Verduras solanaceás, compruebo una y otra vez lo que afectan a la inflamación de mi articulaciones.Para más info ver aquí.
• Lácteos pues me producen mucosidad, dolores articulares y de cabeza y son el caldo de cultivo perfecto para que la candida vuelva a hacer de las suyas.

MI DIETA INCLUYE

• Verdura,fruta fresca, semillas y frutos secos.
• Leche de coco, leche de arroz (ocasionalmente) y ghee.
• Pescado (excepto atún y mero o de piscifactoria), marisco (ocasionalmente).
• Todo tipo de carnes.
• Arroz integral, trigo sarraceno y quinoa (sin abusar de ellos), sobre todo incluyo este tipo de carbohidratos en la cena pues me ayudan a mantener mi nivel de glucosa durante la noche de forma constante y esto me ayuda a conciliar el sueño y permanecer dormida durante la noche.

Mi recomendación es introducir esta forma de alimentación muy poco a poco, eliminando primero los alimentos más nocivos como son azúcar, alimentos procesados y lácteos, aumentando la ingesta de proteína animal y cambiando los cereales refinados que consumamos por cereales sin gluten ,integrales y ecológicos.

Date un tiempo largo de adaptación, a mí me ha llevado más de 3 años, hay que ser muy paciente. Con el tiempo podrás ir reduciendo la ingesta de cereal.

*Si eres diabético, tienes hipoglucemia, insomnio, síndrome de fatiga crónica o fibromialgia, es posible ( depende de cada caso individual) que necesites una porción de cereal  integral en cada comida principal.

*Si tienes candidiasis, no recomiendo fruta durante por lo menos los 3 primeros meses de dieta a excepción de limón, manzana verde, coco o pomelo (máximo una pequeña porción de uno de estos al día).

Una vida estresante, una alimentación no saludable, una candidiasis sistémica sin tratar  y una intoxicación por metales pesados y otros químicos dejaron a mi cuerpo desnutrido e incapaz de segregar la cantidad exacta de hormonas que mi cuerpo necesitaba en cada momento.

Estoy segura de que el paso de una dieta rica  en cereales y sin proteina animal o otra con baja ingesta de cereal, alta en carbohidratos provenientes de fruta y verdura y mediana-alta ingesta de proteina animal de calidad ha contribuido enormemente a mi recuperación.

Nota: En la medida de lo posible elegir alimentos ecológicos y de temporada.